Existen muchas soluciones diferentes para la calefacción industrial: desde los sistemas de gas (los más tradicionales y anticuados) hasta los sistemas de biomasa, desde las soluciones de cogeneración (producción de energía térmica y eléctrica en un único dispositivo) hasta las bombas de calor.
Por tanto, para cada solución existen múltiples realizaciones. Es decir, múltiples sistemas de calefacción industrial, cada uno con ventajas específicas y aplicaciones ideales. Pero, ¿cómo elegir entre uno y otro? ¿Cómo saber cuál se adapta mejor a su entorno de trabajo?
Para ayudarle en esta elección, en este artículo le explicamos las principales diferencias entre los sistemas de calefacción industrial.
- Tamaño del edificio: ¿es muy grande la superficie de la nave o el edificio? ¿Los techos son muy altos?
- Aislamiento térmico: ¿está bien aislado y retiene el calor producido o hay importantes pérdidas de calor?
- Zonas a calentar: ¿necesita calentar sólo determinadas zonas o todo el edificio indistintamente?
- Horas/día de funcionamiento: ¿durante cuántas horas debe estar encendida la calefacción? ¿Durante cortos periodos de tiempo o las 24 horas del día?
Diferencias entre los sistemas de calefacción industrial
Vayamos al grano: estos son los principales sistemas de calefacción industrial.
- Calefacción por suelo radiante. A través de serpentines colocados bajo el suelo, fluye un fluido calentado que transporta el calor y lo libera por el camino. Teniendo en cuenta que los almacenes o edificios industriales suelen ser muy altos, si necesitas calentar toda la zona de manera uniforme manteniendo el aire caliente a un nivel bajo, esta puede ser una solución.
- Conductos microperforados. En la parte superior del edificio se colocan conductos con muchos agujeros pequeños por los que se escapa el aire caliente. Como es fácil imaginar, la pérdida de calor es elevada, por no hablar de que el aire caliente tiende a quedarse en la parte superior. Una solución poco eficaz.
- Splits murales de aire caliente. Más que splits, se trata de unidades individuales, dispuestas aquí y allá a lo largo de las paredes, compuestas por un ventilador y un quemador. El quemador produce el calor, que el ventilador distribuye por la habitación. Puede ser una buena solución en caso de que no necesite calentar toda la habitación, sino sólo algunas zonas limitadas. Sin embargo, no es muy respetuoso con el medio ambiente: el aire movido por el ventilador tiende inevitablemente a subir hacia arriba, con un alto grado de dispersión.
- Sistemas de infrarrojos. Los sistemas de infrarrojos utilizan lámparas calefactoras capaces de generar un calor inmediato y preciso. La radiación permite calentar directamente objetos y personas, sin calentar el aire del medio, que por tanto no se estratifica y no provoca pérdidas de calor.
Las ventajas de la calefacción industrial por infrarrojos
Como habrá adivinado al analizar las diferencias entre los sistemas de calefacción industrial, el método más eficaz en la actualidad es el sistema de infrarrojos. En igualdad de condiciones, los sistemas de calefacción industrial por infrarrojos presentan varias ventajas.
Con sistemas industriales como los de Star Progetti, se eliminan problemas como:
- Pérdida de calor. Las lámparas de infrarrojos calientan de forma selectiva, sólo donde es necesario. Puede tener un número reducido de lámparas y colocarlas sólo donde sean necesarias, por ejemplo, sólo en determinados puestos de trabajo. Así, con los infrarrojos, el calor generado entra en contacto directo con los objetos o cuerpos que se encuentran cerca de la lámpara, sin dispersar el calor en el entorno circundante.
- Desplazamiento del aire y el polvo. Como los infrarrojos no sobrecalientan el aire de la habitación, no provocan turbulencias ni levantan polvo u otras partículas. Esto es especialmente ventajoso en el entorno industrial.
- Ruido. Los calefactores de infrarrojos son completamente silencios: no molestan a los trabajadores ni aumentan el ruido producido por la maquinaria.
- Mantenimiento. Los sistemas de calefacción por infrarrojos de Star Progetti no requieren mantenimiento y nuestras bombillas duran más de 7000 horas.
- Precalentamiento. No es necesario poner en funcionamiento el sistema de calefacción con antelación para alcanzar la temperatura deseada a tiempo, ya que las lámparas de infrarrojos producen calor inmediato. Basta un clic para encenderlas y empezar a disfrutar del calor generado.
- Emisión de CO2. Nuestros calefactores de infrarrojos son más respetuosos con el medio ambiente porque no emiten CO2.
La diferencia sustancial entre los sistemas de calefacción industrial convencionales y los sistemas de calefacción por infrarrojos está en la eficiencia y el coste. Sin costes de instalación o mantenimiento, sin pérdidas de calor y sin precalentamiento: esto significa que puede ahorrar hasta un 70% en comparación con los costes de los sistemas de calefacción industrial convencionales.
Dónde instalar un sistema de calefacción por infrarrojos
Los sistemas de calefacción industrial por infrarrojos son ideales para muchos sectores industriales:
- mecánico
- náutico
- textil
- químico
- agrozootécnico
- alimentario
Además, en Star Progetti realizamos soluciones ATEX que pueden integrarse de forma segura en zonas de producción industrial con alto riesgo de explosión.